lunes, 28 de noviembre de 2011

El orden natural

¿Por qué, oh dígame Señor, el río frondoso se desvía
del caudal de aguas frías, para secarse en el desierto?

¿Por qué las briosas estrellas relucen todo su esplendor
y el cielo nublado e impúdico insiste en hacerles mella?

¿Por qué el calor servil, pese a la alegría que nos brinda,
culmina su camino en la penumbra del desabrido frío?

¿Por qué la rosa bella y etérea, que florece en primavera
sucumbe ante lo adverso, en el gris e inhóspito invierno?

¿Por qué, le ruego una respuesta, ese amor que concedo
perdura en un enredo de tamaña incerteza impuesta?

Entonces suspira la brisa entre las ramas de los robles,
asciende por sus cuellos hasta sus copas mediterráneas...
Desde lo alto, con sapiencia, clama de forma espontánea:

En el orden divino, el cambio es el destino, de las almas aprendices
Es la vida en su influjo, cautiva del embrujo, producto del momento,
acéptala en su torrente, siendo consciente, de su ciclo y tus matices.

Libra a tus anhelos, di sí a la conjunción empero, otro regalo del tiempo.
Vive el hoy en su brizna, en definida consigna, como lo hago yo... El viento.

domingo, 20 de noviembre de 2011

El silencio y la soledad

Soy tierra, hija fértil del vasto océano
habito en el manto de índigo sonoro
que profiere sus himnos con aplomo
en caudalosa corriente de son eterno

Himnos que discurren en aguas agitadas
fluyen instintivos, como peces en la mar
son pensamientos de la razón ajetreada
que van y vienen con porfiada libertad

Ese vaivén, ora turbio ora trasluciente
con fiera potencia exclama, me embiste,
a veces condena por sus falsos matices
y acalla al silencio temido, y prudente...

Soy isla así, en archipiélago conformada
conjunto de presente, pretérito y futuro
cercada de otras islas, de azul profundo
soledad compartida en tierra encarnada

Como un todo yo, busco la marea calma,
para que fiel refleje la paz de mi alma
rescate al sano silencio de su dolencia
y nutra a la soledad en mi consciencia

sábado, 12 de noviembre de 2011

Mírame ahí

Mírame ahí, por esa grieta descuidada
galería secreta entre máscara y núcleo
morada sigilosa del vasto amor pulcro
que reside en el hueco de mis entrañas

Mírame con esos ojos ávidos y potentes,
quiénes con ahínco entran en el légamo
de mis sueños inflamados, subyacentes,
presentes en mis huesos, en su tuétano

Mírame con tu fragancia de flor de azahar
aroma que perfuma la aureola de mi alma
escurre por mis manos, sus dedos y palmas
entorpece a mi cordura y a mi accionar

Mírame sencillo, como deseo a tu mirada
con el brío de la elegancia de un naranjo,
que arrobada admiro como a un ángel,
por ser símbolo de tu mirada deseada.

Mírame de frente, crédulo, no te asustes
si ante tí mi masa exhibe su pulpa dulce,
y la pobre coherencia reniega a su lustre…
No rehuyas. No lo temas. No te asustes

Mírame fijo mientras el viso de mi aliento
descontrolado fluctúa hacia tu encuentro
profiere la verdad, sin palabras y escueto
es mi cuerpo que brama su amor secreto...

sábado, 5 de noviembre de 2011

Descubrirse

Eres mi incontable referencia anónima
el espejo de los tantos vanos ensayos
a veces eres una respuesta antónima
esa reflejada en tus sabios ojos ayos

Eres también el cruel dedo inquisidor
aquél que me expone a mis acciones
lisia a mi orgullo y a sus acepciones
de mi alarma interna el instigador

Eres varias centenas de ojos estimados
miradas ajenas, de mi madurar artífices,
otros ojos que a mi curso han aportado
gran mandamiento del autodescubrirse

Los procuro desde mi carente humanidad
desde esa cualidad mortal e intrínseca
de que somos individuos de la sociedad
y la aceptación es condición implícita

Los procuro desde mi esencia y mis genes
Los recibo en mis creencias, mi memoria
coadyuvantes asisten a la ajetreada noria
que es la vida en su aprendizaje perenne

Hallo a las palabras por tus ojos proferidas
vagan exentas en mi interior, se difunden,
en ciclón de contradicciones que se unen,
me ponen a prueba en tenaz disyuntiva

En ese remolino de miradas cruzadas,
mi mente destaca la crucial importancia
de mantenerse fiel a mi yo, a mi crianza
en señal de la estima propia conservada

Capto apresto ojos, palabras y emociones
me sumerjo en las entrañas del meditar
me abro al influjo de las diversas razones
siempre inclinada a superarme... y a amar

viernes, 4 de noviembre de 2011

Ventana abierta

Mediante la ventana abierta de par en par
El claror matutino penetra en el ambiente
adentra con sus alas de golondrina de mar
y suave aterriza sobre tu figura durmiente

La tengo aquí, reposa su esencia a mi lado
Su brillo descansa en los brazos del alba,
en mis pupilas, en mi lecho, en mi calma
e ilumina a mi alcoba, al abúlico letargo

Yo te miro, aspiro el aire, oigo el jadeo,
mi cuerpo recuerda lozano y delirante,
al edén de las dóciles notas del deseo

Recuerda a los agudos crujidos de mi piel
a minutos de besos cándidos, enardecidos
de manos enlazadas y de abrazos infinitos

Recuerda a los colores, arcoiris rutilante,
destellos de la desnudez del ánima mía
revelada por tu luz, era rostro expectante...

Los tengo así, cuerpo y alma encendidos,
velando juntos, bajo la claridad matutina,
por mis anhelos en tu figura revividos

Reposas ahí, en el cenit de mis sueños,
tu cuerpo ya es preludio de una historia
que enarbola, arbitrario e inconsciente,
el pendón de la promesa en mi memoria